«La clericalización y burocratización constituye una amenaza para la supervivencia del islam»
viernes, agosto 12, 2011
Plática con Abdennur Prado, Escritor y Director de Webislam.com:
La Revista Biblioteca Islámica conversó vía correo electrónico con Abdennur Prado, Director de Webislam.com, el sitio islámico en español más visitado.
—háblenos un poco sobre su retorno al Islam ¿cuándo? y ¿por qué?
—Llegué al islam a través de la escritura. En el 1993 hice un retiro para escribir, y en esa soledad empezaron a emerger contenidos de carácter trascendente, que me llevaron a una total transformación y a una apertura a Dios. Eso sucedió en contra de mi voluntad consciente, pues yo era ateo. Fui tirando del hilo, y descubrí en el islam una cosmovisión, una ética y una práctica de adoración que cuadraban perfectamente con esa experiencia espiritual. No una doctrina externa ni una serie de dogmas en los que creer, sino una forma de vida que nos permite poner en acto nuestras capacidades espirituales, vivir nuestra condición de criaturas sometidas a Dios, y satisfacer nuestra naturaleza más profunda. Tras un periodo de estudio, mi reconocimiento formal del islam tuvo lugar el año 2000, a raíz de mi encuentro con Mansur Escudero, Hashim Cabrera y la comunidad de Dar as-Salam, en el pueblo cordobés de Almodóvar del Río.
—Cómo ha llegado webislam a tener tanto éxito en el mundo islámico de habla hispana
—El éxito de Webislam radica en su apertura, en el hecho de que nos constituimos como una "comunidad interpretativa", en la cual no hay unas jerarquías religiosas que supervisen contenidos para ver si se adaptan a una pretendida "ortodoxia", sino un ejercicio de creatividad, libertad de expresión y pensamiento. Se trata de una web abierta, tanto a diferentes perspectivas musulmanas como a la participación de no musulmanes. Muy especialmente: la inclusión de una perspectiva interreligiosas, desde el máximo respeto, y la apertura a los movimientos sociales y al movimiento altermundista, desde la conciencia de que existe una lucha común contra la globalización corporativa.
Todo el trabajo de Webislam se sitúa por tanto en eso que podemos llamar "democratización del conocimiento religioso", desde la certeza de que todos los seres humanos somos potenciales califas de Al-lâh sobre la tierra, responsables de nuestros actos ante Al-lâh, y encargados del cuidado del mundo.
—Usted es el presidente de la Junta Islámica Catalana, podría decirnos cuál es el papel que juega la Junta para con los musulmanes catalanes
—Junta Islámica es una entidad religiosa formada mayoritariamente por conversos al islam, y vinculada con la Junta Islámica de España. Es importante dejar claro que nosotros no pretendemos representar a nadie. Es más, hemos insistido en que toda pretensión de representar al islam es una impostura: uno no puede considerarse representante más que de aquellos que lo hayan escogido expresamente. Nuestros principales objetivos han sido el reclamar el cumplimiento de los derechos religiosos de los musulmanes, el fin de las discriminaciones, combatir la islamofobia, y propiciar procesos de normalización del islam en la Cataluña (la Europa) del siglo XXI, desde la conciencia de que es necesario contextualizar la práctica del islam a nuestra realidad. Esto no significa adaptar el islam, como pretenden aquellos que nos acusan, sino tratar de recibir y comprender por nosotros mismos la revelación, aquí y ahora, con el fin de rescatar aquello que nos es más necesario en nuestro contexto. En este sentido, la Junta Islámica se opone a los intentos de control del islam por parte de países extranjeros, que tienen una agenda y unos intereses propios, que no responden ni a los intereses del islam ni al de los musulmanes en España.
—Cómo está configurada la Comunidad Islámica de Cataluña
—Una de las características más evidentes del islam en España (y Cataluña no es una excepción) es el de la precariedad organizativa. Hay que tener en cuenta que la presencia del islam en Cataluña viene mayoritariamente de la inmigración, y que esta es muy reciente. La mayoría de estos vienen de zonas de Marruecos con altas tasas de analfabetismo y de pobreza. Existen muchas nacionalidades de origen, y muchas veces ni siquiera tienen una lengua común. A las diferencias culturales se suma las dificultades inherentes a la inmigración: la organización del islam no es lo prioritario para muchos inmigrantes. A esta precariedad social y organizativa se suman los intentos de control ideológico de países exteriores, principalmente de Arabia Saudí y de Marruecos. En definitiva: la comunidad islámica en Cataluña esta indefensa ante el avance de la islamofobia y ante la falta de reconocimiento de nuestros derechos religiosos (derecho a abrir mezquitas, a ser enterrados según el rito islámico, a recibir alimentación halal…).
—Cuando hablamos de feminismo islámico qué debemos entender, muchos musulmanes no sabemos qué es este fenómeno.
—Por feminismo islámico entendemos la lucha por la justicia de género en el marco del islam. Pretende eliminar la discriminación contra las mujeres en todos los ámbitos, desde la convicción de que el mensaje del Corán no justifica el patriarcado. En el campo teológico, propone una relectura del Corán con perspectiva de género, desde la conciencia de que las lecturas patriarcales del Corán constituyen una distorsión de su mensaje igualitario. En el campo jurídico (fiqh), propone la reforma de los códigos de familia patriarcales vigentes en muchas sociedades musulmanas.
—¿En qué sentido el feminismo islámico difiere del llamado feminismo occidental?
—El feminismo islámico es un movimiento enteramente basado en el Corán y en la Sunna del Profeta Muhámmad (saws). La centralidad del Corán es algo reivindicado una y otra vez por todas las feministas. Es lógico, pues el Corán nos da todas las claves para la igualdad de género.
Es difícil comparar con el feminismo occidental, pues este es muy diverso. En cualquier caso, el feminismo islámico rechaza el eurocentrismo de muchas feministas occidentales, y denuncia que este feminismo eurocéntrico ha sido y sigue siendo un aliado del colonialismo.
—En una entrevista usted señaló que las escuelas tradicionales fueron codificadas bajo una concepción patriarcal, ¿piensa usted que las escuelas tradicionales deberían ser renovadas?
—Constituye un error presentar esta opinión como "progresista" o "vanguardista". ¡Todo lo contrario!: es el propio fiqh tradicional el que establece dicha renovación como una necesidad interna. Uno de los principios del fiqh es el de la necesidad de contextualizar las respuestas jurídicas. Sin iÿtihad (esfuerzo interpretativo) el fiqh se cosifica y deja de dar respuesta a las nuevas situaciones y necesidades históricas. Este es el único modo que los musulmanes tenemos de mantener viva la lucha contra la opresión y la injusticia. Actualmente, deberíamos repensar el fiqh en el marco de la globalización capitalista, de la sociedad de control y de la destrucción del planeta tierra bajo un paradigma científico-técnico. Es necesario poner en primer plano la dimensión ecológica del islam. Al mismo tiempo, es imprescindible releer la cuestión de género y de minorías religiosas. Es también imprescindible avanzar hacia una democratización del conocimiento religioso, pues la clericalización y burocratización creciente del islam constituye una amenaza de primer orden para la supervivencia del islam (1).
—Qué opinión le merecen aquellas mujeres musulmanas que ejercen cargos de liderazgo pero que no están de acuerdo con el feminismo islámico
—¡Todo mi respeto! Muchas veces nos separamos tan solo por palabras. Yo entiendo que el término "feminismo" provoque un cierto rechazo, desde el momento en que ha sido utilizado para justificar colonialismos e invasiones. Además, existe un feminismo ateo militante, y es indudable que dentro del feminismo se han cometido excesos y excentricidades. También es cierto que existen sectores que lo único que quieren es que las mujeres engrosen el mercado del trabajo y se conviertan en nuevas consumidoras-productoras, sin el mínimo respeto por su dimensión interior.
Pero eso no debe llevarnos a la confusión, ni a vincular gratuitamente dichos excesos con el feminismo islámico. Como he dicho antes, el feminismo islámico es un movimiento basado en el Corán, y por tanto tiene en cuenta tanto la dimensión espiritual del ser humano como el objetivo supremo de la justicia social.
—Considera usted legítima la postura de algunas personas homosexuales de reivindicar el derecho a asistir a las mezquitas y practicar el Islam, es decir ¿hay en el Islam espacio para estas personas?
—En primer lugar, debo decir que es del todo impropio indagar sobre la condición sexual de las personas. Eso pertenece a su privacidad, y en el islam se nos previene en contra de los chismes y de meterse en la vida ajena. Cuando alguien viene a rezar a la mezquita, no tiene porque declarar sobre este punto. Además, ¿quiénes somos nosotros para cerrar las puertas del islam a nadie? A partir de aquí, podemos discutir si la homosexualidad constituye o no una transgresión de las leyes de Dios, o si realmente el Corán condena la homosexualidad (2) (amor entre dos personas del mismo sexo) en los versículos referidos al Profeta Lot (aleihi salem). Personalmente, considero que no es así, y que estos versículos hablan de la promiscuidad sin freno y de la transgresión de las leyes de la hospitalidad. En cualquier caso, dicho debate debe realizarse desde el respeto. Una cosa es decir que se trata de un pecado, y otra justificar castigos o discriminaciones. Creo que la homofobia y la persecución de los homosexuales tienen unas bases extra-islámicas. En ningún caso podemos justificar una fobia (que es una enfermedad) en nombre del islam.
—Desea usted dejar un mensaje a los musulmanes de El Salvador
—No olvidemos: Al-lâh es Bello y ama la Belleza. Nuestro objetivo como seres humanos es adorar a Al-lâh en todos nuestros actos, luchando contra cualquier forma de opresión, cuidando a nuestros semejantes y tratando de embellecer el mundo…
Que Al-lâh os bendiga y os ayude a hacer aquello que sea de Su agrado.
Notas
1 Obviamente esta posición no es compartida por la jurisprudencia shiita y sunita, las cuales preparan desde sus instituciones religiosas a personas calificadas para ejercer como clérigos islámicos
2 La mayor parte de los grandes jurisconsultos shiitas y sunitas concuerdan en considerar a los actos homosexuales como prohibidos y punibles.
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